cuéntame de tus cien años de soledad
y yo te cuento de mis amores con delgadina
de las cartas que nunca me han llegado
por no tener quién me escriba
y por supuesto las más de mil que he enviado
para salvar vidas
encender rescoldos o para que se hicieran sábanas
en las tierras humíferas de diferentes manos
cuéntame de tus cien años de soledad
y yo pinto tu piel con el polvo mágico
de las alas de mariposas amarillas
que aunque el poema dice que eran azules
siempre fueron amarillas
azules eran los ojos del perro...
"cuentos viejos"