le pedí que solo me diera su espalda
y a las risas me dijo
y vos no pensáis nunca dejar de ser loco
como respuesta le volví a pedir su espalda
por unas horas
por dos o tres poemas
por un sueño
hasta que quisiera irse
la vi marcharse después de dos o tres vidas
en que como primer acto del rito
desnudara su espalda de buenas noches
y amaneciera boca abajo
la espalda desnuda esperando los buenos días...
"espaldamientos"